Liderazgo y Valor Humano: Claves para el Éxito Empresarial
El verdadero motor de una empresa no son sus activos, sino su gente. Más allá de ponerse la camiseta, el cambio radica en la pasión, en la integración del ser humano como eje estratégico. Porque el tiempo es finito, y solo un equipo motivado transforma la realidad.
VALOR HUMANO
José Ángel Miniello
En las próximas publicaciones buscare generar esa nueva visión, escucha y energía que se transforme en una chispa que dé lugar al cambio en las relaciones interpersonales en las Empresas.
Mucho se habla de Recurso Humano, ponerse la camiseta, sentir la Empresa.
Se gastan miles de horas de capacitación en busca de que el Empleado sienta a la Empresa como propia y se “ponga la camiseta”.
Ponerse la camiseta.
Como si fuese una prenda….
Recordemos, toda prenda tiene un desgaste y una vida útil corta y, como todo sabemos termina en el cajón del olvido o desechada.
La única camiseta que no se desgasta es la que envuelve en energía de la pasión. La que se afirma a tu ser, la que se funde en tu esencia. Por eso la camiseta del Equipo por el cual sentimos pasión se funde con nuestra energía. Esa camiseta se lleva en el centro de nuestro ser.
Termino deportivo si lo hay: “ponerse la camiseta”.
Ahora, pensemos un minuto. Estamos en los mismos tiempos en el que se acuño esa frase. En esa etapa, de la era Empresarial, la camiseta se te imponía, no se ponía. Aunque te quedase grande o pequeña, no importa el talle, a la fuerza se colocaba, y se colocaba para sobrevivir y no perder tu trabajo. Aunque en algunos casos el resultado era positivo, el miedo rodeaba parte de esa camiseta.
Ahora… ¿sirve esto? ¿Trabajar en base al miedo, sirve? ¿Que alcance posee?
El mundo luego de la pandemia ¿es el mismo? y en los 5 años previa a ella, ¿era el mismo?
La respuesta es simple. NO.
Hay un cambio profundo en la manera de ver y percibir la realidad por parte de cada uno de nosotros y nuestro entorno.
El cambio se inició previo a la pandemia, y no se percibía con fuerza.
El cambio no era solo en la industria 4.0, sino en las relaciones interpersonales.
Hemos cambiado profundamente en nuestro ser, sentir, pensar y vivir la relación con nuestro Tiempo. El cercano contacto con la pandemia, pasando al castellano básico, nuestra cercanía a la muerte nos demostró cuan frágiles somos.
Nos ha llevado a que cada uno de nosotros a asignar prioridad 1: “El Tiempo”.
El Tiempo no como como unidad de medida, sino, como forma de apreciar y sentir nuestra relación con la vida.
Aprendimos que es finito, y que nada puede comprar un segundo.
Y este fue el disparador del cambio de conciencia colectivo que generó un giro de 180° en el ecosistema de cada empleado en relación con la Empresa.
Hablar de Dirección Recursos Humanos o de Dirección de Personal, hace referencia al individuo como elemento, y no lo incorpora o integra como eje central y estratégico para el crecimiento de la Empresa.
Si Uds. me preguntan que miraría al momento de adquirir o funcionar una Empresa, lo primero sería su personal, el clima interno, la actitud que posee y la ambición por el cambio que posee.
Adquirir para inyectar fondos es lo más simple; lo complejo es tener un músculo sano con ganas de salir a poner lo mejor. Sus activos humanos.
Henry Ford analizaba a sus ejecutivos no solo por sus títulos, sino por su actitud. Pero no solo actitud para con sus pares y superiores, sino 360°. Él solo lo hacía. No lo enunciaba, como muchas veces se utiliza como una frase de propaganda, Él lo llevaba a la práctica.
No tener en cuenta el valor de las personas que trabajan en una Empresa es como comprar un auto sin ruedas y esperar que avance.
En las próximas publicaciones iré profundizando. Aportar el conocimiento al conjunto nos hace permitir crecer como seres humanos, porque todos somos parte de este gran Equipo llamado Sociedad.